Serbia y Kosovo aceptan la propuesta de la UE para normalizar sus relaciones
Kosovo y Serbia han aceptado una propuesta mediada por la Unión Europea para normalizar sus tensas relaciones bilaterales, según declaró el lunes el responsable de Asuntos Exteriores de la UE, Josep Borrell.
La confirmación se produjo tras unas conversaciones de mediación en Bruselas, en las que participaron el Presidente serbio, Aleksandar Vucic, y el Primer Ministro de Kosovo, Albin Kurti.
Según Borrell, ahora son necesarias nuevas negociaciones para aplicar el acuerdo, que podría concluir a finales de marzo.
Según Borrell, ambas partes se comprometieron a no tomar medidas unilaterales que pudieran provocar tensiones y poner en peligro el acuerdo. Vucic y Kurti han mostrado un comportamiento responsable, dijo.
“Este acuerdo es ante todo para los ciudadanos de Kosovo y Serbia”, dijo Borrell. Entre otras cosas, añadió, prevé que las personas puedan circular libremente entre Kosovo y Serbia con sus pasaportes, documentos de identidad y matrículas.
El acuerdo podría abrir nuevas oportunidades económicas y atraer más inversiones a Kosovo y Serbia, dijo el máximo diplomático de la UE.
También fomentaría el comercio, ya que dejarían de ser necesarios los certificados que antes se exigían para importar y exportar. Además, se protegerían mejor los derechos de los serbios de Kosovo.
Kosovo, hoy habitado casi exclusivamente por albaneses, pertenecía a Serbia. Tras un levantamiento armado de los albanokosovares y violaciones masivas de los derechos humanos por parte de las fuerzas de seguridad serbias, la OTAN bombardeó lo que entonces era la antigua Yugoslavia, formada por Serbia y Montenegro, en la primavera de 1999.
De 1999 a 2008, la Misión de Administración Provisional de las Naciones Unidas en Kosovo (UNMIK) administró el territorio.
En 2008, el país se declaró independiente. Serbia sigue sin reconocer este paso y reclama el territorio para sí. Los esfuerzos diplomáticos de Occidente no han conducido a una normalización significativa de la situación en los últimos años.
A finales de 2022 volvieron a aumentar las tensiones entre serbios y albaneses en el norte de Kosovo, tras la detención de un ex policía de etnia serbia acusado de incitar a cometer atentados contra funcionarios de la comisión electoral.
En respuesta, militantes serbios levantaron barricadas en una docena de puntos de la región, bloqueando las carreteras de acceso a dos pasos fronterizos con Serbia.
Alemania y Francia habían presentado en otoño un nuevo plan de mediación, que la UE adoptó posteriormente.